¿De dónde viene el agua mineral?

El agua mineral natural tiene su origen en la naturaleza. Es decir, surge como consecuencia de un proceso natural que comienza cuando el agua de la lluvia se filtra en las rocas de una montaña. Luego hay otros procesos como, por ejemplo, el largo viaje subterráneo en el cual el agua adquiere sus diferentes minerales hasta llegar a un acuífero que se halla en la profundidad de la tierra.

Si bien lo más destacado del agua mineral es su sabor único y su cualidad de benéfica para el organismo (“el agua es lo más sano que hay”, dicen los propios especialistas), su proceso de origen y evolución es constante.

Características más importantes del origen del agua mineral

Este proceso y sus respectivos pasos son los que permiten y explican el sabor del agua mineral y todas sus propiedades y beneficios para la salud. Asimismo, una vez que llega al mencionado subsuelo queda completamente protegida de contaminación. Y el tiempo de permanencia y la profundidad del propio acuífero conforman la personalidad del (denominado) agua mineral natural.

Para comprenderlo de manera más sencilla, el origen del agua mineral se resume en los siguientes pasos:

• Llueve ya sea agua o nieve. Esta última se descongela luego de un tiempo y se convierte en la primera

• El agua se filtra en las rocas y se mineraliza a través de las propiedades allí presentes

• El agua llega a un manantial subterráneo donde queda protegida

• Diferentes empresas la envasan sin añadir ninguna propiedad ni tratamiento químico ni microbiológico para poder trasladarla y comercializarla

Beneficios principales de este tipo de líquido

Tal lo descrito al principio, el agua mineral es única e inigualable, tanto por su proceso de origen como por las propiedades que adquiere. Estas últimas son justamente las que explican por qué es tan sana y recomendable para cualquier persona; al ingerirse en el organismo provee los siguientes beneficios:

• Ayuda a fortalecer los huesos y a los dientes

• Permite controlar la irritabilidad nerviosa y a relajar los músculos, ya que se trata también de un energizante natural que contribuye al equilibrio energético de las neuronas

• Aporta un nivel suficiente de sodio para fortalecer las distintas funciones y partes del cuerpo

• Oxigena las células y posibilita una correcta oxigenación tisular

• Mantiene los fluidos corporales en niveles estables

¿Todas las aguas minerales son iguales?

Esencialmente sí, ya que todas poseen una esencia similar; es decir, comparten la cualidad de originarse del agua de la lluvia o nieve y trasladarse por un elemento mediante el cual adquiere sus propiedades benéficas.

Sin embargo, cabe aclarar que no es igual el sabor final de un agua envasada en montaña que en una sierra o que permanece en un manantial. En cualquier caso será natural, pero la abundancia o escasez de determinadas propiedades hará que su sabor varíe.

En este sentido, existen hoy en día decenas de sitios para adquirir agua mineral natural. Y no hay una que sea mejor o más exquisita que otra, ya que depende pura y exclusivamente de las costumbres y preferencias de cada persona.